Paseaba entre estanterias sumergido en mis pensamientos cuando levanté la vista y mis ojos se toparon con una arrugada mirada, no le di importancia y proseguí mi andar envuelto en mi mundo cuando…
Esa cara me sonaba… no? Estuve como un par de minutos preguntándome si esos ojos eran los mismos que dejé de ver hace ya 12 años, los mismos doce años que había estado viéndolos; entre dudas empecé a pasearme por los pasillos para buscar ese rostro y asegurarme de ser quien creía que era, pero ya no la encontré, aun recuerdo su mirada…y sí, era ella.
Me hubiera gustado saludarla y darle dos besos, y que se diera cuenta de en qué se había convertido ese niño que un día llegó a su clase con 6 años y a quien siempre tuvo aprecio, estoy seguro de que le habría alegrado el día, pues los encuentros amables con quien siempre te has llevado bien, son tremendamente satisfactorios. Se que ella me reconoció, porque recordando su mirada, era de las que dicen…yo te conozco.
Qué mal me supo no volver a encontrarla…
...si nos vemos no se lo que hacer...
